Te hablan de problemas, tú les propones soluciones.
Mi admirado John llevaba cinco años retirado de los ruedos. Había dejado malos hábitos atrás y quiso ser para su hijo Sean la madre que nunca tuvo y el padre que nunca fue con Julian. Double Fantasy rompía el silencio. Es tan bueno este álbum que resiste hasta el incordio de varios experimentos de la artista vanguardista que era Yoko, por suerte uno de ellos es memorable, algo se le tenía que haber pegado de su marido. Entre todas las joyas que contiene este disco yo me quedaría con Watching the Wheels (Mirando las ruedas), en ella intenta justificar su alejamiento de los focos, defender su vida de hombre anónimo aunque las limusinas le esperaran en la calle.
La gente te dice que estás colgado por hacer lo que haces. Seguro que no eres feliz ahora que no entras en el juego, cuando les dices que te encuentras bien mirando sombras en la pared, sorprendidos te dicen que no puede ser cierto, ya no estás en la cresta de la ola y estás tirando tu vida por la borda. Como en la memorable I'm only sleeping (Solo estoy durmiendo) te llaman vago, tú les contestas que muy bien, ya no quieres seguir el rollo, no quieres llevar el carrusel nunca más, lo miras y dejas que se vaya.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Debo tener en cuenta lo que me dijiste algún día y no escuchar tu silencio de ahora.