que nací contra mi voluntad
en esta calle de rincones envenenados,
donde el carmín de las paredes
no es de hoy
y existe una necesidad continua
de acudir al auto-escarnio.
(Pilar Molina)
Te la juegas en otros
campos que nunca tendrán dueño y te sale bien, Pilar, domas en unos versos memorables tu apetencia de desorden, haces rumbo en la deriva de
las estrellas sin brillo que no sienten, de las palomas sin vuelo y sin color, y sabes perder con belleza.
Ya sabemos que fue más importante para la reconstrucción anímica de Occidente perder en Las Termópilas que
ganar en Marathón. Vivir no significa aceptar la victoria, sino amar en los
tiempos difíciles y desear morir antes que la humillación o la pérdida de nuestro mundo tal como lo conocemos, el olvido duele más
profundo que el recuerdo si no nos acordamos de que amamos alguna vez. Todo lo demás solo sirve para adornar o matizar un estado preciso en que creemos en Dios aunque sea efímero.
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Debo tener en cuenta lo que me dijiste algún día y no escuchar tu silencio de ahora.