A esta pena no he podido acostumbrarme
(Friedrich Hölderlin)
El resplandor mortecino que abriga
una corona de
espinas ensangrentada,
el despertar de
tartanas y barro
que obstruyen las
aceras
de nuestras
aventuras cuando vivir era sueño,
y el abandono
se ajustan a la
frente de mi barrio
mordida por las
olas y el salitre
que inunda la Playilla
y empapa su pobreza
donde duermen los
barcos varados para siempre,
y arrastra esta
ausencia de niños que caminen,
la cartera a la
espalda,
peinados,
somnolientos,
los adioses de
ortigas y cardos en la Vía
y los geranios blancos
que escuchan los requiebros
de amantes
solitarios que lloran bajo la luna.
El ahogado
quejido resuelto en la llamada
de antiguas
soledades, de héroes sin rostro
entre sábanas azules que anuncian la salida
del viejo
pescador que murió una noche triste ,
y no puede zarpar
con él mi alma que sufre dulcemente
porque está aquí
en mi playa y en los muelles destrozados,
en los besos sin
nombre, en canciones que suenan
y se mecen en la arena
de mis primeros juegos,
en sirenas sin pudor
que sonríen en la orilla
y te enamoran...
¡Qué lejos estás
ahora que te siento perdido
y no me llamas!
¿Qué sombra se ha llevado mi sonrisa en el
viento?
(Publicado el 1 de Junio de 2013)
Hola F.Enrique,¿cómo va todo?.
ResponderEliminarMúltiples sensaciones he sentido en esta mágica mezcolanza de cante y poesía,de desgarro de garganta y versos acunados por el embrujo de las cuerdas de las guitarras.Hay que sentir hasta el punto de emocionarse para entender lo que digo y yo sé que tú me entiendes.
Nada nos saca tanta pena de dentro como el recuerdo de la infancia perdida y nada nos inspira tanta belleza como ese recuerdo y la consecuente incapacidad de recuperar los momentos que se quedaron para siempre entre la vorágine de un tiempo que voló sin remedio.Pero hay que saber decirlo,como lo haces tú.Hay que saber plasmar toda esa pena oculta que nos causa la nostalgia para poder luego vivir más ligero de equipaje,aunque solo sea por un tiempo breve,porque los poetas no paramos de explorar nuestro interior,como buzos ciegos en mitad de la noche.¡Pero nos es tan necesario,tan preciso como el respirar!
"...y no puede zarpar con él mi alma que sufre dulcemente
porque está aquí en mi playa y en los muelles destrozados,
en los besos sin nombre, en canciones que suenan
y se mecen en la arena de mis primeros juegos,
en sirenas sin pudor que sonríen en la orilla
y te enamoran..."
Enorme tu poesía Francisco.
Un abrazo,amigo.
Pienso, Joaquín, que el azar determina muchas cosas, a ese inicio balbuceante, desabrido, falto de un mínimo atributo poético y que representa al mundo de ahora se le opone la idealización de la infancia, lugar donde residen los dioses que atravesaron el crepúsculo. El resto es encontrar a alguien que tenga palabra para decirlo, y, en eso, me encuentro contigo que sabes tanto de nostalgia. Sin duda es un privilegio contarte entre mis amigos,desprendes la bondad machadiana.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un abrazo.