En una tarde muy triste,
triste como tus ojos
dejan a quien los mira,
puedes romper el cielo,
abrir el horizonte,
evocar al poeta
que pulsaba la lira
y pensar que el amor
en ti es como la muerte,
de donde no se vuelve,
cuando no se respira.
Te leo y releo.
ResponderEliminarMe gusta la tristeza de estos versos porque hay amor en ellos.
Un abrazo.
Hay que trasladarse mucho tiempo atrás para encontrarse con este poema, Fanny. Hacía mucho tiempo no lo leía, es uno de los pocos poemas míos que podría haberlo escrito de memoria.
EliminarGracias, Fanny.