Quizás prosiga triste por haber olvidado
su
sonrisa de invierno despejando la aurora,
sus
rosas derramadas en el viento de junio,
sus
manos que tuvieron la emoción de las horas.
Quizás
prosiga hablando de lugares perdidos,
de
sombras que perduran en un temblor sin alba,
de
rostros que pasaron bajo la luna errante,
de
amor que no fue amor pero me hiela el alma.
Hola Enrique... cuanta poesía tienen tus palabras. Cada verso escrito es un poema donde verdaderamente parece que el poeta deja su melancólica tristeza.
ResponderEliminarPrecioso, me ha encantado y por vaguería nunca paso a ver si se me pega algo, jajaja , pero esto no se aprende, tiene que salir así, tan bello como tu lo dices.
Un abrazo para ti y para Inma.
Me ha resultado muy agradable, Elda, contar con tu presencia precisamente aquí, ya que no hablábamos desde la última vez que nos vimos. He tenido que rebuscar en los cajones para encontrar este poema y me alegro porque ha procurado un nuevo contacto contigo. Seguiremos viéndonos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ese último verso tiene una fuerza inmensa,Enrique.Hay ocasiones en que no tenemos muy claro lo que sentimos por alguien y sin embargo, las consecuencias son nítidas y hasta dolorosas.
ResponderEliminarComo de costumbre, leerte me reconcilia con las musas y con el mágico mundo de la poesía.
Un fuerte abrazo
Es siempre grato encontrar tus palabras, Joaquín, en ellas viertes una sensibilidad única que nos remite a la que derramas con singular acierto en tu poesía. Gracias por éstas que con tanta amabilidad me ofreces.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola! Te he hecho una nominación para los Liebster Awards, pásate por mi blog cuando puedas: http://relatoscortosconcafe.blogspot.com.es/
ResponderEliminarUn saludo
Te agradezco mucho, Geus, la nominación. No estoy lo que se dice muy animado, pero ya he visitado tu página y he leído las condiciones para participar en estos premios. No descarto entrar en una iniciativa que me parece estupenda, pero el tiempo pasa mientras me lo pienso.
EliminarUn abrazo.
Amor que no fue amor pero...hiela el alma....
ResponderEliminarA veces las sensaciones se entremezclan y nos hacen experimentar nuevos tipos de " melancolía".
Vengo del blog de Geus...
Un abrazo de luz
Gracias, AtHeNeA, contar con tus palabras ha sido una sorpresa muy agradable.
EliminarUn abrazo.
Siempre que se habla de "lugares perdidos", de "amores que amor no fueron, pero"... Siempre que se remueven los sedimentos que dejaron las personas amadas... ¡" se hiela el alma"!.
ResponderEliminarExcelente poema, Enrique. Siempre te leo con emoción.
Un abrazo.
Quizás hubo un día, Fanny, que supe concretamente lo que quise decir en este poema pero se ha ido difuminando con el paso del tiempo, dedicado como está al amor de siempre no me queda claro lo que le quise decir con ese "amor que no fue amor", forma parte de esos vaivenes que sufren los sentimientos, de la inseguridad más triste aún cuando es injustificada. Encantado me quedo con tu respuesta, reconozco que siento una gran satisfacción cuando veo la palabra emoción al lado de uno de mis poemas.
ResponderEliminarYo creo que todas las emociones nos esculpen y uno no se olvida de los golpes del burilado. Otra cosa diferente es no querer acordarse, Francisco.
ResponderEliminarLa vida del pasado parece siempre una cosa perdida, sin embargo, corresponde a todos los ladrillos del presente.
Un abrazo grande!
Creo, Simón, que yo no habría tenido la madurez que muestras cuando tenía tus años ante una encrucijada de sensaciones tan complejas. Me movía en un estado depresivo, miraba la espinas del amor, la soledad tan sola que te aísla en el sentimiento de la muerte. Y veía a los solitarios que vagan por las esquinas.
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