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Ya no tengo tu aliento, me duele y lo proclamo
en el silencio hondo de no saber decirlo
y me enfrento al levante sin luz en sus orillas,
yerro por estas calles rotas de los vampiros
de mis catorce años,
esos que no conociste,
no miras aunque reclamas.
No quisiera escuchar las cosas que dijiste,
me duele la cabeza y no puedo callarlas,
me moriré en la noche por haber sido infiel
a lo que deseaba, a lo no prometido.
No me hables de estepas, sombreros o claveles
en esa alma fría que rige un pensamiento,
no arrastres mi sonrisa como si no la vieras,
no abras mi corazón a la locura de los hombres.
8
Y voy avanzando en la calle que me hiere,
como un funámbulo sin red que teme las alturas,
como un niño travieso, sin tino y tropezado
que no fue al colegio,
buscando la caricia del sol en primavera,
con la línea estrecha e insalvable
que de ti me separa,
y de mí me defiende,
avanzando sin saber si estos versos que sufren
encontrarán cabida
en el libro de texto de alguna colegiala
que viva en el amor de un nombre ingrato,
de una fecha que no será guardada,
de una mirada vencida por el tiempo
9
Hay un museo vetusto en los escombros,
una espera en el sol que nunca acaba,
un simulacro de hiedra que desciende
hasta los pies de un césped que se apaga,
y en esa soledad que huye y se aproxima
se derrite la sombra que dejaste,
la rabia del amor que defendiste,
el grito de la fe que mata y agoniza
cuando pisas el dolor de quién no puede herirte,
brindas por la llegada de un orden que no existe.
Ay amigo, yo no sé quien es ese señor que pones como título, tampoco me importa, solo sé que este poema tiene una gran belleza. Escribes con esa melancolía de un tiempo pasado que te duele, y sale de tu corazón adornado por tu pluma mágica. Me gusta muchisímo el primer verso.
ResponderEliminarHay mucha categoría en tus letras Enrique, bajo mi humilde punto de vista eres muy grande.
Me encantaría leerte una poesía romántica derrochando amor. ¿La escribirás algún día?. Total por una vez, ¿no?.
Te mando un abrazo.
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ResponderEliminarI'm through with love, I'll never fall again, goodbye spring I'm in a frigidere
ResponderEliminar(la canta la gran Marilyn Monroe en Some like it hot)
¿Y por qué aguantas que se metan contigo?, y a esas mujeres si no te aportan nada?.
ResponderEliminarSi es eso lo que haces, tienes la vida que quieres, osea que no te puedes quejar nunca. Y como siempre no me contestas a lo que te comento, ni a la pregunta. Solo lo que tu quieres. ¡Que paciencia!, jajaja.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarPor cierto, Elda ¿Has visto el blog de mis tres maestras? Bueno, ellas me tratan como un discípulo que promete aunque les lleve 20 y 30 años de ventaja. ¿Llevo o no llevo razón cuando te digo que aburren y una de ellas en vez de llevar esperanza incita al suicidio?
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