Blackbird singing
in the dead of night
Take these broken wings and learn to fly[1]
Take these broken wings and learn to fly[1]
(Paul McCartney – Blackbird)
Cantas en el invierno
y cantas en la noche,
en el árbol desnudo
que yace en los escombros
turbios de los recuerdos
del patio amurallado
que extiende sus ladridos
y aún no he podido verte.
Cantas y no te importa
saber si alguien te escucha;
quizás quieras decirme
que rompa esta tristeza,
que no debo ceder
al peso de los años,
que siempre hay un motivo
para encumbrar la vida
y desterrar los huertos
que anuncian soledades.
Quizás quieras decirme
Quizás quieras decirme
que cante en el silencio
de este barrio dormido
aun con el alma rota
en el desván del sueño,
la voz triste y serena
de un marco desolado
y tiemble en la emoción
de un blanquecino enero
que sufre ante la luna
que al marinero guía
y alumbra al caminante.
Quizás quieras decirme
que aguante en el invierno
como el árbol desnudo
que espera un nuevo día
aunque reine la noche
y acoge la llamada
rebelde de tu canto
pensando en el recuerdo
de sus hojas caídas.
1- Mirlo que cantas en la noche profunda / toma estas alas rotas y aprende a volar.
El amor por la naturaleza nos lleva a identificarnos con ella,a hablar con ella y a escucharla.Es el caso de tu poema ante el canto de ese mirlo solitario.Sólo un alma de poeta es capaz de entender el canto de los pájaros,de saber lo que dicen.Y no hablo de ornitología,sino de sensibilidad.
ResponderEliminarHay que aguantar en los inviernos de la vida e incluso cantar,como el mirlo.
Un abrazo,Enrique.
Creo, Jerónimo que la realidad nos ofrece siempre una oportunidad de obtener un ejemplo que trascienda a ella misma. Quizás lo más sencillo sea lo más difícil de aprender; no cambian las dificultades porque cantemos, pero podemos atravesarlas con más amor a la vida.
EliminarGracias, Jerónimo, por este detalle tuyo. Un abrazo.
Sin duda eso es lo que quisiera cantarte. Un canto para sólo los elegidos. Hojas caídas, hojas muertas que darán paso a la vida.
ResponderEliminarhttps://www.youtube.com/watch?v=7jG2EAneeQ0
Saludos nocturnos y cantores.
Pienso, Susi, que le debemos mucho al canto. Nos ditinguimos por las canciones que elegimos, suelen ser más hermosas en los tiempos difíciles, ahora los atravesamos por el empeño bursátil de unas personas que se dejaron el talento aprobando unas oposiciones muy difíciles. Cantemos pues con el escaso margen que nos dejan para la utilización de la metáfora.
EliminarUn abrazo, Susi.
Todos somos en infinitas ocasiones ese mirlo, ausente y solitario, perdido y taciturno... Me encantó el ritmo del poema, su musicalidad, todo lo que muestra y todo lo que encierra. Hay poemas que son como el alma humana... Un abrazo, poeta.
ResponderEliminarMe resulta un poema tremendamente triste y muy bello, con versos excelentes en los que te quieres identificar con ese mirlo, por la fuerza que derrama y a pesar de tu melanclía, demuestras como él que, por encima de todo, amas la vida Entre tanta poesía, la tuya es verdaderamente un mirlo blanco.
EliminarGracias, Ana. Siempre es un motivo de alegría que alguien se acerque a este lugar que sigo tratando con especial esmero. Creo que ha sido mi manera de tratar un tópico que no busqué; fue tan sencillo como lo narro, despertarme aún de noche me proporcionó el conocimiento de un mundo que hasta entonces había pasado desapercibido para mí.
ResponderEliminarUn abrazo.
Este poema, Beatriz, implica una pequeña derrota. Llevaba varias noches escuchando al pájaro y, convencido de que era un ruiseñor, pensé en Keats y en una oportunidad que me ofrecía la fortuna de retar a la inspiración. Se lo comenté a un vecino al que también le gusta despertarse temprano y me sacó del error; era un mirlo que había elegido por escenario un árbol de hoja caduca cuyo nombre no conoce ni quien lo plantó. Sé que Keats está muy lejos ¿ Pero tanto como para que no pueda embarcarme en el intento?
ResponderEliminarEstoy encantado con los halagos que me regalas últimamente, pero sé, Beatriz que tienes un espíritu crítico muy bueno y siempre positivo, me da por pensar que en la medida que menguan o desaparecen los halagos en otros casos parece que me quieras levantar el ánimo, lo que en el fondo me gusta. Aunque con una experiencia corta en esto de Internet, en relación a la poesía, parecer que vas en serio es muy bien aceptado, demostrarlo, no tanto.
Un abrazo.